RUTAS DE SENDERISMO
Esta ruta nos ofrece un itinerario alternativo por Los Cahorros, pasando por sus eras y regresando por el Camino de la Solana; un paisaje de singular belleza, con inmejorables vistas del cañón y su entorno.
Río Monachil La partida de esta ruta la iniciaremos en Monachil pueblo, ascendiendo por la calle Trinidad Carreras, caminando junto al río hasta llegar, tras la primera curva, a la Fuente del Piojo, en un desvío a nuestra derecha, que refrescará nuestros primeros pasos.
Era Portachuelos Tras una breve subida, nos encontramos con la era Portachuelos, vestigio de un pasado de cultivos de secano, trigo, centeno, espelta, avena e incluso cebada, cereales que cubrieron la mayor parte de estas tierras y que fueron utilizados, entre otras cosas, para hacer pan de diferentes calidades, techos para las chozas, comida para ganado... en ellas, después de haber segado, se trillaba la parva, se esparcía por la misma era, y a pleno sol, para que estuviese mas seca y se separase mejor la paja del grano, se pasaba el trillo tirado por un par de bestias.
Eras de los Renegrales
Descendemos por un carril entre huertas y cortijos con numerosos frutales que albergan gran diversidad de pequeñas aves; seguimos nuestro camino en dirección Cahorros Altos, para lo cual, tendremos que subir una gran pendiente hasta llegar a las eras de los Renegrales. Las eras han sido siempre estrategicamente construidas en zonas altas, dónde las corrientes de aire ayudaban a aventar la parva, y separar en diferentes montones grano y paja una vez trillado. Desde aquí obtenemos unas maravillosas vistas del cañón, conformado por unas inmensas paredes de roca caliza, excelentes para la práctica de la escalada.
Puente colgante Nuestro camino continúa por el sendero que discurre por la izquierda y que va adentrándose en el desfiladero, hasta encontrarnos con las ruinas de la casa del guarda de la antigua central eléctrica, tras la cual, llegamos a la base del puente colgante de 63 metros de longitud. Éste, salva el río para dejarnos en el comienzo de la parte mas angosta e impresionante del camino. En la parte superior de las paredes, en ocasiones podemos observar como éstas sobresalen a modo de cornisas, pudiendo imaginar un tiempo remoto, en que ambos lados estuvieron unidos, formando un gran túnel oradado por el agua y que aún podemos ver al llegar al túnel de las Palomas.
Azuelas
A la salida del cañón, nos encntramos con un paraje más abierto, Las Azuelas, cuyo nombre puede provenir de una herramienta usada para la agricultura desde la prehistoria. También es llamado Cerro de las Uvas, por la abundancia de viñas que hubo tiempo atrás. Aquí nos encontraremos un pequeño puente colgante, así como una caseta perteneciente a la conducción de agua potable para el abastecimiento de la Mancomunidad Río Monachil. Al pie de ésta, existe una pequeña fuente de la que podemos beber. Esta es una zona ideal para descansar, sobre todo cuando se va en grupo, así en fin de semana es fácil encontrarnos con mas personas.
Fuente Las Chorreras Los mas solitarios, disfrutarán sin duda reposando en la fuente Las Chorreras, situada a unos minutos de las Azuelas, subiendo por el sendero que discurre paralelamente a la derecha del canal. En ella podremos sentarnos bajo una sombra al pie de la fuente (potable) y junto al río.
Camino de la Solana El regreso lo realizaremos por un sendero que parte desde la señal que indica el Camino de la Solana, situada entre Las Azuelas y la fuente Las Chorreras. Tras cruzar el río por el Puente de las Chorreras, nuestro caminar irá discurriendo por el margen derecho del río, elevándose hasta culminar en su punto mas alto con la mejor panorámica de Los Cahorros. Continuamos nuestra marcha que discurre por una de las zonas mas agrestes, y que crea un bello contraste al encontrarse con la Acequia de los Habices, estando custodiada en parte de su recorrido, por unos esbeltos álamos. Tras pasar por debajo del Cortijo del Cerrillo, volvemos a encontrarnos con una maravillosa panorámica de las eras de los Renegrales. Al final de esta vereda, tras pasar por la linde de una serie de cultivos, llegamos al Camino de la Solana, que desciende hasta Monachil, pasando antes por la Era Portachuelos.


Recomendaciones/Observaciones
- Esta ruta está recomendada para todas las épocas del año. - Esta ruta no está señalizada, se recomienda utilización de mapa y/o el track para gps. - En esta ruta existen pasos de alta dificultad con caída a distinto nivel.
Desgargue topoguía editada por el Ayuntamiento de Monachil "Ruta 2: Cahorros por Era de los Portachuelos" 
WIKILOC (pulse para ver ruta en Google Earth, descargar track para gps, ¿Cómo llegar?, etc).
Autores
Francisco Álvares Navas-Parejo: Texto ruta, fotografías, propuesta de ruta. Jose Ignacio Lucena García: Mapa, track, perfil, rutómetro, fotografías, propuesta de ruta.
Esta ruta nos ofrece un recorrido por la historia y la tradición de Monachil, un camino utilizado desde antaño por los pueblos de alrededor, para rendir homenaje al Santo y que posee unas excelentes panorámicas del pueblo, Granada y su sierra.
Descripción
Calle Cuevas Comenzamos ascendiendo por la fuerte pendiente de la calle Cuevas, que como su propio nombre indica, a lo largo de ella nos encontramos varias, éstas fueron habitadas durante largos años por las gentes de Monachil y hoy en día son utilizadas en su mayoría para guardar animales, lo cual no deja de restarles encanto. Toda la subida está salpicada de chumberas, que son cobijo y sustento de una gran variedad de especies de pájaros que nos alegran el camino.
Los Tejares Al finalizar la ascensión nos encontramos con un abrevadero desde el que obtenemos unas maravillosas vistas del pueblo, pudiendo comprobar en el entramado de sus calles, reminiscencias musulmanas de su pasado. Desde esta posición privilegiada, se pueden distinguir una serie de terrazas en el terreno donde se asentaron los distintos tejares que se han ido sucediendo en el tiempo desde la época musulmana, y de los cuales ya sólo nos quedan dos, la cerámica artesana de gran belleza del Tejar de Blas y el Tejar de Pepico, de carácter industrial. A nuestra espalda quedan los restos de una antigua cantera de la que se abastecían los tejares y en la que se pueden encontrar innumerables fósiles marinos de un pasado sumergido.
Peñón del Grajo A partir de este punto, abandonamos el carril de cemento y nos adentramos en un sendero que nos llevará hasta el peñón del Grajo. Este lugar es merecedor de una pausa, sentados desde el mismo peñón podremos identificar Pradollano, el Cerro Huenes, los Alayos de Dilar, y gran parte de la Vega Granadina , desde Las Gabias pasando por Vegas del Genil, Sierra Elvira, hasta la Sierra de Huetor.
Cortijo Las Rosas Tras una breve parada, comenzamos a adentrarnos por el sendero entre retamas y aulagas, por lo que hace cincuenta años eran terrenos sembrados, tras los cuales nos encontramos con la era del cortijo Las Rosas. Tenían cultivos de regadío (patatas, habas, tomates.) y de secano (trigo, cebada, avena, centeno.)
Mirador de la Cruz Si subimos la loma por el sendero que queda a nuestra izquierda, podemos obtener la mejor panorámica de todo el recorrido junto a la cruz, puesta por los misioneros a mediados de los años cincuenta. Aquí podemos observar desde Pradollano hasta Sierra Elvira, siendo un buen lugar para hacer un descanso.
Cañada Real Los Neveros Continuamos por un carril de tierra, dejando atrás el cortijo Las Rosas y poco a poco, va apareciendo en el horizonte una serie de casas pertenecientes a Cenes de la Vega , situado al pie del río Genil. Tras un ligero descenso, vamos a conectar con la Cañada Real del Camino de los Neveros, por el que continuaremos descendiendo hasta llegar al contadero, paso estrecho de ganado, en el que tradicionalmente se hacía el recuento.
Cuesta de las Cabras Abandonamos el camino de los Neveros para continuar por el carril de la izquierda, la Cuesta de las Cabras, que nos permitirá caminar entre cultivos, tras los cuales, y una vez pasado el cementerio, admiraremos el valle de Monachil.
Cortijo Los Olivares Una vez pasada la fuente, tomamos el carril de tierra a nuestra izquierda, que desciende entre huertas muy cerca del río, hasta llegar al cortijo Los Olivares, donde al pie de unos chopos y junto a la acequia del Albaricoque, podemos disfrutar de un descanso en una zona privilegiada.
Cerro de la Encina El camino pasa junto al yacimiento arqueológico del Cerro de la Encina , perteneciente a la cultura del Argar (1800- 1300 a .c.) donde podemos observar restos de los muros de las casas y de fortificaciones, de uno de los primeros asentamientos de Monachil.
Acequia del Albaricoque A partir de aquí, guiará nuestros pasos hasta Monachil la acequia del Albaricoque, siguiéndola en sentido contrario al del agua, un camino entre árboles asomado a la vega que deleitará nuestros sentidos, no pudiendo acabar de mejor forma nuestra ruta.

Recomendaciones/Observaciones
- Se trata de la ruta más baja de Monachil, por ello también la más calurosa. Se recomienda en Otoño, Invierno y Primavera. - Esta ruta no está señalizada, se recomienda utilización de mapa y/o el track para gps.
Desgargue topoguía editada por el Ayuntamiento de Monachil. 
WIKILOC (pulse para ver ruta en Google Earth, descargar track para gps, ¿Cómo llegar?, etc).
Autores
Francisco Álvares Navas-Parejo: Texto ruta, fotografías, propuesta de ruta. Jose Ignacio Lucena García: Mapa, track, perfil, rutómetro, fotografías.
Este interesante recorrido circular sigue, en parte, una antigua senda abierta en su día para la repoblación forestal del Cerro Huenes. Transcurre principalmente por el interior del Parque Nacional rodeando uno de los grupos de cumbres de media montaña más llamativo de Sierra Nevada, con frondosos bosques de pinares. Las mejores épocas para recorrerlo son la primavera y el otoño, pudiendo encontrarlo parcialmente nevado en el invierno.

Recomendaciones/Observaciones
- Esta ruta está recomendada para todas las épocas del año, aunque en inviento puede haber zonas con hielo y/o nieve. - Esta ruta es un SENDERO HOMOLOGADO, señalizado y mantenido por Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.
Enlaces/Descargas
Enlace a Ventana del Visitante - Sendero Cerro del Huenes (Junta de Andalucía). Desgargue Cuarderno del Sendero editado por Junta de Andalucía. 
WIKILOC (pulse para ver ruta en Google Earth, descargar track para gps, ¿Cómo llegar?, etc).
Autores
Texto extraido del Cuaderno del Sendero Cerro del Huenes editado por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. Fotos de esta página, track y fotos en Wikiloc: Jose Ignacio Lucena García.
A través de esta ruta obtendremos la panorámica mas completa de Granada, su vega, Sierra Nevada, Sierra de Huetor y Sierra de Arana, en un itinerario cargado de historia.
Descripción
Camino de los Neveros
Comenzamos nuestra andadura junto al camping El Purche, al paso del Camino de los Neveros. Este camino está formado, en realidad, por tres Cañadas Reales que discurren por los términos municipales de Huetor Vega (Cañada real de los Neveros), Monachil (Cañada Real de la Cuerda) y Güejar Sierra (Cañada Real del Collado de las Sabinillas). Era utilizado antes de que los Reyes Católicos conquistasen el Reino de Granada, para subir el ganado a pastar a las zonas mas altas de Sierra Nevada, y posteriormente lo potenciaron. Esto da una idea de la importancia de la ruta en el entramado español de vías pecuarias.
Pero el nombre de este camino, es debido a la ruta que utilizaban los arrieros, que subían a Sierra Nevada en verano con sus mulas, en busca de hielo. Éste era llevado a la Casa de la Nieve, en la calle Varela en Granada, donde se vendía para conservación de alimentos, medicinas... o la preparación de helados. Así, podemos observar los restos de los Pozos de los Neveros, junto a la carretera del Purche. Son hoyos excavados en la tierra, donde los Neveros dejaban la nieve prensada, de forma que tardara mas en derretirse, y volver subir a por más.
Cultivos y Minería
Esta zona tuvo también cierta actividad minera, así podemos encontrar a lo largo del recorrido, indicios de la existencia de las minas del Cerrajón, de las que se extraía plomo y zinc, junto a la Placeta del Purche. Fueron cerradas en 1920, debido a la dificultad de extracción y de transporte que los encarecían.
El resto de la zona, eran cultivos de secano, en su mayoría hoy abandonados y utilizados parcialmente para pasto, formando un espinal-tomillar, formado por majuelo, escaramujo, endrino, agracejo, junto a cantueso, matagallos, tomillo, aulaga... entre otros.
En la ruta pasaremos junto al Cortijo de la Solana y de Manolón. Ambos aún conservan suficientemente la estructura, dejando ver la importancia que tuvieron en el pasado. Desde la era del Cortijo de la Solana obtendremos una excelente panorámica, siendo merecedora de una parada para contemplar su belleza.
Sanatorio del Purche
En otoño de 1930, se construyó el Sanatorio del Purche, en la cima del llamado Cerro del Sanatorio. D. Fermín Garrido, catedrático de la Facultad de Medicina y ex-rector de la Universidad, abrió este centro de carácter privado para tratar la tuberculosis.
Enlaces/Descargas Desgargue topoguía editada por el Ayuntamiento de Monachil "Ruta 4: Purche - Cerrajón"
Enlace a Wikiloc donde podrá ver la ruta en Google Earth y descargarse el track para su GPS.


¿Qué es Sulayr?
Sulayr, la montaña del sol, palabra con la que los árabes conocían Sierra Nevada, es la designación simbólica que en nuestros días ha dado nombre a un gran sendero. El itinerario circular de mayor longitud en la geografía andaluza y española ofrece 340 Km a través de singulares paisajes penibéticos.
Sulayr recupera decenas de kilómetros de antiguas veredas tradicionales, caminos de herradura y vías pecuarias. Su trazado se ha perfilado buscando una práctica fácil y segura del senderismo y la puesta en valor de los Equipamientos de Uso Público existentes en el macizo, principalmente Centros de Visitantes, Aulas de Naturaleza, Jardines Botánicos y Refugios.
También se ha tenido en cuenta la localización de los ecosistemas nevadenses más frágiles, de forma que se eviten interferencias negativas en los mismos. La fisiografía, la geomorfología, las formaciones vegetales hacen de Sulayr un sendero panorámico que ayuda a interpretar toda la riqueza paisajística que atesora Sierra Nevada.
 Puede obtener más información de este sendero de Gran Recorrido (GR-240) a través de Ventana de Visitante de los Espacios Naturales - SULAYR.  Mapa de la etapa de Monachil. 
El Sulayr a través de Término de Monachil Ruta 1. Centro de Visitantes el Dornajo - Jardín Botánico de la Cortijuela Distancia: 15 Km Tiempo estimado: 5-6 horas M.I.D.E.: 2-2-2-3
El inicio de este tramo del Sulayr está localizado en la misma Carretera de la Sierra, a 300 metros del Centro de Visitantes Dornajo, y a espaldas del Hotel Don José donde comienza la pista de San Jerónimo, que transcurre por un pinar de repoblación sobre substrato calizo donde, en los claros del bosque, vemos plantas aromáticas como la alhucema, la salvia, la mejorana, el tomillo, y arbustos espinosos propios de esta altura como el agracejo, el endrino, el rosal silvestre o el majuelo.
Continuamos la pista rodeando el Barranco de las Víboras hasta el collado del mismo nombre, donde cruzamos el famoso Camino de los Neveros, un recorrido habitual hasta principios del siglo XX para estos esforzados hombres que a diario, en los meses calurosos, ascendían con caballería desde Granada en busca de la nieve del Veleta o de sus inmediaciones para luego venderla en la capital. Dejamos atrás este legendario camino, que es también Vía Pecuaria, y seguimos la pista durante unos quince minutos hasta un cruce.
El carril de la izquierda conduce al Convento de San Jerónimo, junto al cortijo del mismo nombre que durante el siglo XIX fue lugar de residencia de científicos y aventureros en Sierra Nevada. Aquí compartían el rancho con los pastores, que hacían de guías en sus incursiones a la alta montaña y estudiaban la flora de la zona. Entre otros visitantes ilustres tenemos a M. Willkomm, Boissier, etc.
Nosotros tomamos la pista de la derecha que desciende durante tres kilómetros hasta el río Monachil. Durante esta larga bajada podemos ver frente a nosotros parte del itinerario que vamos a realizar, en la otra vertiente del río. Dejamos a nuestra derecha el Cortijo de Diéchar y a pocos minutos abandonamos la pista que lleva a la zona del Purche, para cruzar el Río Monachil. Este río nace en la base del Pico del Veleta, y su propio cauce es utilizado como pista de esquí, ya que la estación invernal de Sierra Nevada, visible durante nuestro trayecto, se encuentra en su tramo alto, en la zona conocida como Pradollano.
Nada más cruzar el frondoso río Monachil dejamos la pista que conduce a la Dehesilla y tomamos a la izquierda un carril que paralelo al río comienza a tomar altura. Tras franquear una cerca de ganado pasamos junto a la Toma del Canal de la Central Eléctrica de Diéchar. Caminamos entre arces y durillos hasta llegar al Barranco de la Mojonera, zona de transición entre el área caliza y la silícea de Sierra Nevada. Comenzamos a ver robles en nuestra subida, que lentamente van extendiéndose por las abandonadas labores, donde es fácil ver ganado suelto.
La pista gira dando vista al Barranco de Manuel Casas en su confluencia con el Monachil. Continuamos la pista que de nuevo se asoma al Barranco de la Mojonera y en menos de un kilómetro finaliza junto al Barranco de Manuel Casas. Aquí encontramos una antigua extracción de serpentina, material noble, verde brillante, muy utilizado en decoración arquitectónica. Atravesamos la cerca de ganado y sobre la corraleta sube la vereda pegada al río hasta una zona rocosa donde hay una era abandonada y un aprisco en las rocas.
Sigue la vereda paralela al río hasta cruzar un riachuelillo con varios majuelos y luego la senda transcurre pendiente entre dos arroyos. Pasamos por una corraleta entre el piornal, dejando atrás los últimos robles hasta alcanzar la vereda que viene desde la Estación de Esquí de Pradollano.
Seguimos a la derecha este sendero, que de nuevo pasa de substrato silíceo al calizo, y asciende hasta el cerro del Mirador, donde tenemos estupendas vistas del valle de Monachil. El resto del itinerario ya es de bajada. Antes de entrar en el pinar vemos ejemplares de pino silvestre autóctono de gran porte y todo tipo de plantas aromáticas. Bajamos al Collado de Matas Verdes, un prado donde pasta el ganado, donde dejamos el sendero que por la cuerda llegaría hasta Monachil, para tomar el de la izquierda que en menos de media hora llega hasta la Casa Forestal de la Cortijuela.
Esta es una ruta privilegiada, asociada siempre a curso del valle del Río Monachil, a través de la cual podremos comprender el principal valor de Sierra Nevada, su biodiversidad. Observaremos una profunda transformación del paisaje, pasando de un clima periglaciar hasta llegar a los pies de la Vega.
Descripción
Pradollano Comenzamos nuestra ruta en la Fuente del Mirlo en Pradollano, para tomar el carril del circuito de esquí de fondo de Prado Redondo, que desciende junto al curso del valle. Estamos a una altitud de 2100 metros (aproximadamente). Esto supone unas condiciones de vida muy duras, siendo las temperaturas en verano muy elevadas, pudiendo llegar a los 40ºC, mientras que en invierno el frío es extremo, por debajo de los 0ºC. Para poderse desarrollar en estas condiciones, las plantas presentan hojas aciculares o escamosas, con porte almohadillado, que hará que soporten mejor el peso de la nieve y la escasez de agua. Ésta no se encuentra facilmente disponible, bien retenida en forma de hielo a bajas temperaturas, o en forma de vapor de agua debido al calor. Nos encontramos con una vegetación formada por sabinas (Juniperus sabina), piornos (genista baetica), enebros (Juniperus nana), cojín de pastor (Arenaria pungens), piorno de crucecitas (Vella spinosa), rompebarrigas (Festuca indigesta), astrágalo, zahareña, tomillo de la Sierra (Thymus serpylloides)... y pinos procedentes de repoblación, sobre todo Pinus pinaster.
Prado Redondo En esta zona, aún podemos observar los restos de alguno de los cortijos modestos, construidos con lajas y con techo de paja de centeno. Fueron utilizados por agricultores y pastores, que los ocupaban cuando se retiraban las nieves. Éstos no tenían ventanas y estaban divididos en dos estancias. La primera, que era donde se sentaban alrededor de una lumbre practicada en un agujero en el suelo, para cocinar, calentarse..., y una segunda para dormir. Todas estas tierras (incluido Pradollano) eran cultivadas tanto de secano como de regadío, proporcionando las famosas patatas de Sierra Nevada, las llamadas de "copo de nieve". Para su conservación se enterraban en unos hoyos tapizados con pizarra y cubiertas con paja de centeno, palos y tierra, en los cuales podían resistir todo un año. Aún se pueden observar tanto los hoyos como la era de Prado Redondo.
Prados del Aire Seguimos el sendero y cruzamos el barranco de Valdeinfierno y Manuel Casas, para llegar a una bifurcación. Tomamos hacia la derecha, camino que baja zigzagueando en dirección al robledal. En la ladera de enfrente, podemos observar los Prados del Aire, en los que a mediados del siglo XX, se situaba una mina para la extracción de serpentina. A lo largo de este sendero tenemos la oportunidad de obsevar la presencia de agracejos (Berberis hispánica), quejigos (Quercus fagínea), encinas (Quercus rotundifolia), endrinos, heléboros, majoletos, rosales silvestres...
Robledal Este robledal pertenece a la Dehesa de San Jerónimo, en la cual se encuentra el cortijo que lleva su mismo nombre. Aquí se alojaron científicos ilustres a lo largo del s. XIX, como Edmond Boissier o Moritz Willkomm, atraídos por el interés botánico de Sierra Nevada. Estas tierras eran ampliamente cultivadas de centeno, trigo, patatas y garbanzos, por los monachileños que subían en verano y en las cuales, llegaron a pastar hasta 6000 cabezas de ganado caprino, bovino y mular. Actualmente, aún se conservan restos de los cortijos, que fueron utilizados hasta los años 60. En cuanto a la flora se refiere, el elemento principal de esta formación es el roble melojo (Quercus pyrenaica), el cual aparece acompañado de áceres ( Acer opalus subsp. granatense ), tejos (Taxus baccata), cerezos (Prunus avium), rascaviejas (Adenocarpus decorticans), quejigos (Quercus fagínea)... Esta población es un reducto de un pasado en el que los robles ocuparon una mayor extensión en Sierra Nevada, debido a la actual disminución de la humedad.
Central eléctrica de Diechar Al salir del robledal, continuamos por el carril que nos llevará a la central elétrica de Diechar, construida en 1919. Antes de llegar al primer cruce de caminos, encontraremos un manantial a nuestra izquierda, con el que podremos reparar nuestra sed. Tomamos el carril de la derecha, para lo cual, debemos pasar un vallado que limita el parque, a través de una puerta de madera, que dejaremos siempre cerrada. Este camino nos llevará hasta la central. A patir de aquí, abandonamos el carril para continuar nuestra ruta a través de sendero.
Central elétrica de la Vega Nos adentramos en un impresionante cañón, menos conocido que el de los Cahorros, pero de similar belleza. Discurriendo entre grandes desniveles, al pie del Cerro de los Poyos y del Tajo de la Campana, hasta llegar a nuestra segunda central. En el camino nos encontraremos con encina (Quercus rotundifolia), sustituida en ocasiones por un coscojar (Quercus coccifera) con chaparras y majoletos (Crataegus monogynia) y retama ( Retama sphaerocarpa ).
Fuente Las Chorreras Antes de llegar a las Azuelas, pasaremos junto a la Fuente de las Chorreras, marcada por una señal y cuyo manantial se encuentra a unos metros por encima de ella. Aquí podremos sentarnos a descansar bajo una sombra al pie de la fuente (potable) y junto al río.
Las Azuelas El paraje de las Azuelas es también conocido como Cerro de las Uvas, por las muchas viñas que antaño hubo. Aquí existe un pequeño puente colgante, así como una caseta perteneciente a la conducción de agua potable para el abastecimiento de la mancomunidad Río Monachil. Al pie de ésta, hay una pequeña fuente de la que podemos beber. Esta es una zona ideal para descansar, sobre todo cuando se va en grupo, así en fin de semana es fácil encontrarnos con mas personas.
Vereda del cañón Este sendero discurre por la base del cañón de Los Cahorros, entre paredes calizas de mas de treinta metros de altitud, que están modeladas por el paso del agua, en un tiempo subterránea, y que aún podemos observar al adentrarnos en el túnel de las Palomas. Aquí podemos disfrutar de la presencia de numerosas aves, entre otras, la Chova Piquirroja (Pyrrhocorax pyrrhocorax). Existen algunos tramos que presentan una pequeña dificultad, al inclinarse las paredes sobre la vereda y tener que pasar agachados.
Puentes colgantes Al salir de la parte mas angosta del cañón, nos encontraremos con un puente colgante de 63 metros de largo, construido a principios del siglo XX. Éste cruza el río sobre una cascada, hoy de hormigón, que sirvió de presa para el canal de una central eléctrica. Continuamos nuestra ruta por un camino de escaleras y barandas muy bien marcado, en el que atravesaremos otros puentes de menor longitud. El camino es muy cómodo y de una especial belleza, siendo ésta la mejor de las despedidas para nuestra ruta.
Central Eléctrica de Tranvías Para finalizar, tras atravesar una zona de huertos con cerezos e higueras, llegamos a nuestra última central, la de Tranvías, llamada así por suministrar electricidad a este transporte ecológico, hoy tristemente desaparecido, y que desde 1991 es propiedad del Ayuntamiento de Monachil. Desde aquí, un hermoso carril, conducirá nuestros pasos hasta el pueblo, en busca de nuestro merecido descanso.


Recomendaciones/Observaciones
- En invierno, en su zona alta, tendrá nieve y hielo; en primavera, también en su zona alta, podrá encontrarse con abundantes chorreras y encharcamientos debidas al deshielo. Se recomienda para el verano y el otoño. - Esta ruta no está señalizada, se recomienda utilización de mapa y/o el track para gps. - En esta ruta existen pasos de alta dificultad con caída a distinto nivel.
Enlaces/Descargas Desgargue topoguía editada por el Ayuntamiento de Monachil "Ruta 3: Pradollano a Monachil". 
WIKILOC (pulse para ver ruta en Google Earth, descargar track para gps, ¿Cómo llegar?, etc).
Autores
Francisco Álvares Navas-Parejo: Texto ruta, fotografías, propuesta de ruta. Jose Ignacio Lucena García: Mapa, track, perfil, rutómetro, fotografías, propuesta de ruta.
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